El cuerpo de la página web es todo lo que está dentro de la etiqueta body, delimitada por <body> y </body>. Es importante saber la estructura del contenido para la optimización del contenido web.
Dentro de esta estructura aparecen todos los elementos visibles por el usuario: fotos, texto, animaciones, etc. Para mejorar la indexabilidad y facilitar la rastreabilidad del contenido, tenemos que estructurar la información a través de ciertas etiquetas que facilitarán el trabajo de
lectura del robot.
Para una correcta indexación de nuestra página web, debemos asegurarnos de que el código no contenga errores y de que el contenido esté bien jerarquizado.
Errores de Codificación Web para optimizar el contenido
Para estos errores W3C dispone de una herramienta online de validación del código HTML. A través de validatorw3.org podemos subir nuestros archivos HTML que conforman nuestra página web y analizar si contienen errores de código. El objetivo es limpiar la mayor cantidad posible de errores, advertencias y recomendaciones posibles. Aunque hay que tener en cuenta que dada la complejidad de algunas webs, sobre todo las creadas con CMS (wordpress, joomal, drupal,ec.) puede tener una cierta complejidad y limpiar la web será una tarea complicada.
Contenido y Jerarquía
Nos debemos de asegurar que nuestro contenido se encuentra bien jerarquizado. Igual que para redactar un libro se utiliza títulos, subtítulos y diferentes formatos de texto para ayudar a la lectura, en internet también hacemos esta tarea.
Jerarquía en la optimización de contenido web
La manera óptima de especificar la jerarquía de los encabezados es mediante las etiquetas de cabecera «H», que van desde H1 a H6.
<H1> es el elemento HTML que se suele utilizar para identificar la cabecera más importante de una página web. Ejemplos de H1 serían el título de una página, el título de un post o el nombre del producto.
En cuanto al contenido, se recomiendan resaltar las partes más importantes de nuestra web a través de etiquetas de formato de texto como, por ejemplo, la etiqueta <b> </b> para resaltar texto en negrita, <i> </i> para la cursiva y <s> </s> para subrayar.
Para facilitar la indexación de nuestro contenido, se recomienda que una página web tenga entre 300 y 600 palabras o que supere el 15% del total de la página.
El contenido
Por otro lado, el contenido ha de ser completamente original y, en la medida de lo posible, el texto ha de incluir las palabras clave por las que queremos aparecer de manera correcta, conservando el sentido y evitando la sobreutilización de estas palabras dentro de un mismo texto como en el caso de este artículo «optimización de contenido web«.
Debemos interiorizar que la creación de contenido tiene el objetivo de ser “recolectada” por el robot de Google. Esta información ha de ser útil para el usuario, por lo que se recomienda contenido similar a la búsqueda. Si un usuario está realizando cualquier búsqueda, es posible que
la gran mayoría de veces estas búsquedas comiencen a través de consultas genéricas, las cuales, a medida que el usuario madura en la búsqueda de contenido, acabarán convirtiéndose en búsquedas específicas, técnicas y de nicho. El uso único de una tipología de palabras
o contenido limitará nuestra exposición.